DE LO COTIDIANO

Instantes del afán diario de los humanos que habitamos las ciudades. En este caso, y fundamentalmente, las que me han soportado a lo largo de mi vida: Madrid y Almería. Paseo, deriva, callejeo o como lo queramos llamar, es el método. Nada nuevo. Es lo mismo para todos los que agarran la cámara y se zambullen en el espacio urbano para ver qué les sorprende. No sé si es más dichoso el propio transitar por las aceras que el hecho fotográfico de dirigir la cámara hacia algo concreto y apretar  el obturador. En todo caso son esas dos pasiones las que me mueven a recorrer el escenario urbano. El resultado suelen ser imágenes en blanco y negro con poca o ninguna presencia humana. Esto que aquí presento es una excepción.